Cómo trabajar con equipos para aumentar su eficacia, talento y motivación, según Liz Wiseman autora de Multiplicadores

¿Alguna vez has trabajado con personas con las que te has sentido más inteligente y más capaz? Si es así, has tenido la suerte de trabajar con alguien de «estilo Multiplicador»; los multiplicadores son personas que multiplican la eficacia, energía, creatividad, talento y motivación de sus colaboradores. También es probable que hayas tenido la mala suerte de haber trabajado con alguien con quien has sentido cuestionada tu inteligencia, personas de «estilo Reductor».

Imagina qué pasaría en tu equipo si puedieras actuar algo más como un multiplicador.

Imagina qué podrías conseguir si pudieras liberar toda la inteligencia y potencial disponibles en tu organización.

Liz Wiseman y Greg McKeown, autores del bestseller «Multiplicadores» («Multipliers» en su edición inglesa), han investigado este fenómeno y han encontrado las diferencias entre los responsables de equipo Multiplicadores y los responsables de equipo Reductores. Tal y como afirma la propia Liz Wiseman, en el actual mercado con los niveles de competitividad y la permanente necesidad de evolución, las empresas no se pueden permitir tener y mantener responsables de equipo de estilo Reductor.

Una de las preguntas que hacen a los profesionales es «¿Qué porcentaje de tu potencial consideras que despliegas en tu organización?». Puedes pensar en qué responderías tú mismo. Puedes pensar en qué responderían las personas de tu equipo, tus compañeros o tus colaboradores. En el estudio que han llevado a cabo Liz y Greg han encontrado que la respuesta se divide en dos grandes grupos, uno que ronda el 48% y otro que ronda el 97%.

En la investigación Liz Wiseman y Greg McKeown han encontrado además que tanto los Multiplicadores como los Reductores hacen muchas cosas de forma parecida. Los reductores también son grandes profesionales, muy implicados, con gran orientación a su equipo y a los resultados.

Sin embargo hay cinco cosas que hacen de forma opuesta:

1. Orientar:
   Los multiplicadores retan y proponen desafíos estimulantes para el equipo.
   Los reductores marcan direcciones desde sus conocimientos y posición en la jerarquía.
2. Decidir:
   Los multiplicadores promueven el debate constructivo y el pensamiento crítico para que el propio equipo pueda tomar decisiones.
   Los reductores toman especial protagonismo e influencia en las decisiones, o directamente toman decisiones ellos mismos en exceso.
3. Hacer seguimiento:
   Los multiplicadores apoyan en la acción, dando espacio y criterio a cada persona para que se sienta responsable.
   Los reductores controlan y se implican en exceso invadiendo espacios de actuación de cada profesional.
4. Feedback:
   Los multiplicadores dan reconocimiento a los logros de cada integrante, y ante errores ayudan a explorar, comprender y aprender.
   Los reductores no reconocen suficiente y ante errores ofrecen feedback correctivo responsabilizando a las personas de los mismos.
5. Talento:
   Los multiplicadores atraen y multiplican el talento de las personas, desarrollándolo a su mejor potencial.
   Los reductores tienen dificultades en ver y reconocer el potencial de cada persona.

En cuanto entran en una reunión los reductores hacen descender la inteligencia y talento disponibles en la sala. Sólo tiene que ver con la forma en que interactúan y conversan con los demás. En cambio, los multiplicadores con su presencia aumentan la inteligencia disponible, los niveles de motivación y energía, los retos se superan y se encuentran soluciones a problemas complejos.

Obviamente, no existen los reductores conscientes. Los reductores no son conscientes de este fenómeno, Liz y Greg los llaman los reductores accidentales, y han identificado 6 tipos de reductores accidentales: El optimista, el rápido, el exigente, el rescatador, el creativo y el incombustible.

Os proponemos ver este fenómeno no sólo como algo que aplica a los responsables de equipos, sino como un fenómeno que aplica a toda interacción entre personas. Existe el líder multiplicador, igual que existe el compañero multiplicador. Existe el responsable de equipo reductor, al igual que puede existir el compañero reductor.

– ¿Qué efecto tiene tu forma de trabajar y las conversaciones que tienes con tus compañeros sobre su potencial, niveles de energía y creatividad?

– ¿Cómo podrías hacer para tener un efecto más multiplicador sobre cada uno de tus compañeros y colaboradores?

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Ion Uzkudun Amunarriz
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